febrero 02, 2010

Sueños... ¿premonitorios?

Probablemente nadie me lo vaya a creer, pero hace unos días tuve un sueño, y creo que sólo se lo conté a una persona.

Iba yo con un amigo por las calles de Torreón, me dirigía según recuerdo hacia mi casa, pero noté un detalle extraño: en la puerta de cada casa había un soldado en posición de firmes, como resguardando la entrada. Conforme ibamos avanzando, la situación se ponía cada vez más tensa, pues ya no solo se quedaban ahí afuera de las casas, sino que apuntaban a los coches que pasaban, como buscando a alguien. Luego comencé a ver cómo volteaban hacia una dirección y comenzaban a disparar, como si hubiera comenzado una cacería.

Doblamos hacia una calle que debíamos tomar, y sin querer entramos en la línea de fuego, pues venían detrás de nosotros muchos camiones, ya todos apuntando hacia una casa que se encontraba más adelante en la misma dirección a la que teníamos que ir. Dimos vuelta a la derecha para salir de ese camino. Después de unos minutos, volvimos a asomarnos a ver si ya era posible ir hacia allá (no se, algo tenía que hacer ahí, muy importante, que no podía esperar) y la escena era terrible porque de pronto vi que los soldados que estaban en aquel punto, comenzaron a correr en retirada, gritando: ¡Una bomba!

Lo siguiente que recuerdo es que yo también corrí, nuevamente hacia la calle que había tomado para esconderme por primera vez. Me tiré al piso y me cubrí la cabeza, y entonces... desperté.



A los pocos días de esto, ocurrieron hechos muy lamentables en Torreón, y a lo largo de esta semana se han sucitado varias persecuciones con balaceras, cobrando vida de algunos inocentes. Mi ciudad está en guerra, al igual que otras en el país. Tenía plan de visitar a mis amigos y familiares, pero el miedo general los mantiene adentro de sus casas.

No creo en los sueños premonitorios, pero... la coincidencia me sorprende demasiado. Tanto, que creo que, aunque tenga muchas ganas de ir por unos días a mi tierra, lamentablemente esto tendrá que esperar, hasta que se calmen las cosas.

No hay comentarios: