octubre 31, 2010

Breves.



Desperté y te vi, tendido junto a mi cama. Casi podía adivinar una cínica sonrisita, un gesto triunfante por saber lo que hiciste de mi la noche anterior. Pero me percaté de una cosa: ya había salido el sol, y no tenías más poder sobre mí, por lo que me decidí y me levanté. Con firmeza te sujeté entre mis manos con tal fuerza que te hubiera podido extrangular. Enconces, te lancé violentamente adentro del armario. Te lo advierto: Ahí te vas a quedar, pues no quiero saber de ti nada más, ¡Hasta el próximo fin de semana, maldito par de zapatillas!

octubre 29, 2010

Quien decide qué es verdad.



Dentro de esta pesadilla irreal de fuego, sangre, llanto, inseguridad… dentro de estos anhelos por la paz. En un mundo desmoronándose de guerras, corrupción, enfermedad…. ¿Qué se puede esperar? ¿Qué nos puede salvar?

Cuando la esperanza no es más que un personaje de una leyenda lejana y borrosa. Cuando el prójimo viene comerciando soluciones engañosa. En años en que el odio y el rencor ocuparon los corazones, y ya nadie se acuerda del amor, hace muchos años desterrado. En tiempos en los que es necesario desviar la mirada para no contagiarse de tanto horror delante de si, una pregunta inquieta mi mente:

¿Quién decide qué es verdad?

Una de esas noches que intranquilizaron la ciudad, desperté en la angustia de una almohada mojada por el llanto, y en mi mente te vi. A ti, a quien suelo confundir con el enemigo. Sin embargo has sido, tal vez sin esa intención, quien ha venido a amortiguar la dura eterna caída que es la vida.
Te vi a ti, a quien pedí que se marchara porque estaba cansada de las fantasías, y algún día mi felicidad se vería derrumbada por una emboscada ocasionada por la realidad. Pero en una época en que más que existencia buscamos supervivencia, esquivamos proyectiles de acero y de inhumanidad…  me vuelvo a preguntar…

¿Quién decide qué es verdad? La respuesta es, nosotros mismos.

Así que bienvenido seas nuevamente a mi vida. Inventemos un guión con final feliz, y protagonicémoslo, aunque sea puro cuento, igual y logramos el aplauso de pie. O mejor aún, comencemos a actuar improvisadamente y sin espectadores esta aventura de locos que prefieren perder la cabeza en una fantasía que les ofrece una salvación en vida, que aunque ajena a la realidad, puede convertirse en su verdad particular. Una verdad que les da motivación y energía nueva.

Dejemos que viva y que brote esa semilla de especie desconocida, que ha nacido en nuestra mente y corazón. Dejemos que crezca, a ver hasta qué altura llega. A ver qué flores da en primavera, a ver qué frutas da en verano, y si sus hojas embellecerán nuestras calles el otoño del siguiente año. Ojalá nuestros ojos puedan verlo, y sigamos caminando de la mano, en un mundo en el que decido vivir engañando a la muerte, a la guerra, a la enfermedad, al odio, a la tristeza, al desamor.

octubre 27, 2010

No se olvida

Fondo musical, píquenle aquí:



Acepto que no conocía la mayoría de sus canciones. De hecho, es de esos autores que para comprender del todo el significado de sus letras, hay que aislarse del mundo y escuchar atentos, penetrando en su mente por un camino que van trazando los acordes y los versos.

Pero estaba ahí, en su concierto, y como yo iba a trabajar, no era la ocasión para aquello. Así que fungí como observadora capeando alguna que otra idea con el firme propósito de llegar a mi casa a bajar sus mp3s y aparendérmelas todas de memoria. Pero hubo una canción que logró abrirme paso hacia su total comprensión. Su título, "no se olvida". En voz del propio de Fernando Delgadillo.




Su letra me atrapó en el pensamiento de que, si bien el 2 de Octubre no se olvida, hoy en día vivimos muchas situaciones similares. O incluso peores, pues por lo menos aquella matanza fue por una manifestación de personas que luchaban por un ideal. Las muertes de hoy son sin fundamentos, sin principios, por luchas de dinero y poder.

Por ello quise preguntarle a Fernando Delgadillo si la situación actual merecía su propia canción, pero calló mi boca en la última estrofa de esa melodía que interpretaba, cuando pregunta "¿Cuándo dejarán de rondar dos de Octubres en la tierra?"

Entre el show y la rueda de prensa, quien además posee dotes de filósofo (¿Cómo escribir si así no lo fuera, tan atinadamente, en ese vaivén de metáforas, protestas y declaraciones?) dijo algo muy certero: Estamos celebrando 200 años de una guerra en la que pasamos de depender de un país, a depender de otro, y 100 años de otra guera por repartición de tierras cuyo beneficio solo vieron algunos cuantos.

Entonces yo le pregunté: Estamos en una tercer guerra. ¿La tercera es la vencida, o nos espera el mismo infructuoso resultado? a lo que responde: Eso depende. El problema, para mi, está en la falta de ética de nuestros gobernantes, y la solución en las muchas cosas que hay que cambiar, enfocándose a cuestión de educación, cultura y salud, y no en la violencia.

No solo fue un concierto ameno y lloroso (jajaja no estoy en condiciones emocionales adecuadas para escuchar y soportar el grado de romanticismo revolucionado que trae este cuate) además fue enriquecedor. Agregó en algún momento que "Aunque bien jodido, tenemos país propio y ya varios quisieran decir lo mismo".

Les dejo la entrevista:



Y también les dejo la letra de "No se olvida".

No sé si es por ser después
Del mes de la independencia
Que patriotas declarados
Lo ven con indiferencia
Se excluyó del calendario
De las fechas oficiales
Pero nunca le han faltado
Al dos de octubre honores tales

Clausurados los festejos
Con que se viste septiembre
Luego viene a distanciar al pueblo
De sus dirigentes
Y entonces sí que empezamos
A tomar las referencias
Y se activa la memoria
Vuelven las historias viejas

Y hay quien habla del respeto
A un poder que provocaron
Que si hubo estudiantes muertos
Fue porque se lo ganaron
Y ante éstas me he cuestionado
Si alguien se puede ganar
Que otro le niegue el derecho
De volver a respirar
De que lo priven de todo
Su futuro y sus recuerdos
Por la ofensa imperdonable
De que no vive de acuerdo

Dos de octubre en Tlatelolco
Continúa estando presente
Ronda en plazas y mitines
Pavoroso y contundente
Porque es el día nacional
Que no se perdonó la vida
Por ésto y por los que faltan
Dos de octubre no se olvida

Lo que para unos sirvió
Como un recorte de maleza
Entre la gran mayoría
Sólo es motivo de vergüenza
Pero hay quien alzó su puño al cielo
Ante algo inaceptable
Porque el golpe fue de muy alto
Y se volvió incontestable

Hoy al fin no es mi intención
Reavivar viejas cenizas
Aunque siempre se lamenta
Que no se hiciera justicia
Y que las manos manchadas
Continúen bien escondidas
Entre los que van y vienen
Que ante todo cierran filas
Y a octubre lo ensucia un día
De matanza en la gran plaza
De la que tantos muchachos
Nunca volvieron a casa

Yo pregunto al evocar
Las heridas que nunca cierran
Cuando dejarán de rondar
Dos de octubres en la tierra.